jueves, 24 de marzo de 2016

Tú-tú

Recuerdo el calor de sentirte muy cerca y el calor en las mejillas por esas cervezas que compartíamos en grupo. Recuerdo el deseo de llegar a casa para que siguiera la noche. Recuerdo sobre todo los edificios de piedra, la decadencia de esas calles en las que construíamos algo que se sigue manteniendo fuerte y que ha aguantado firme un par de terremotos de los que sacuden el cuerpo.


miércoles, 11 de marzo de 2015

Despacio

Porque estas cosas llevan tiempo y porque despacio es todo más seguro. Sin prisa y asegurando bien cada movimiento, como los niños cuando empiezan a caminar, como en la escalada o en la cuerda floja. Poco a poco.
Puede no parecer un gran movimiento, pero hoy he vuelto a escuchar música después de meses de silencio en mi habitación. Meses de silencio también en la escritura. Otro gran pequeño paso. He elegido una canción que no suelo escuchar a menudo para no desgastar los recuerdos que acumulé en su letra. Si alguna vez tienes la sensación de estar viviendo el mejor momento de tu vida, la mejor temporada, una situación inigualable, selecciona una canción y escúchala en bucle de la mañana a la noche y poco a poco (como todo), se irá instalando en tu mente la relación entre ese éxtasis pasajero y la melodía. Después apárcala un tiempo, deja que se asienten tranquilamente los recuerdos y cuando los necesites, echa mano de ella. No habrá fotografía o pensamiento tan vívido, nada podrá hacerte revivir esas sensaciones como la melodía de la canción que una vez sonó mientras estabas inmerso en ese gran momento que ahora no es más que lejanía y nostalgia. Hoy han vuelto a sonar todas esas tardes de paseos, noches de hablar sin sueño y mañanas de lluvia y mercado que cuenta mi canción. Ahora vuelve a estar en el cajón, para que no se "gaste", pero también está guardado el miedo a que alguna canción cobije malos momentos presentes; así que la música está de vuelta en mi habitación. 
Desde luego no es el acontecimiento del mes, pero mejor despacio que resbalarse.

Además, si tú no tienes prisa, yo sigo teniendo todo el tiempo del mundo.







Gracias por ser el arnés en este ocho mil particular.

martes, 14 de mayo de 2013


"Aquella idea ilegal me iba inundando la cabeza... Me perdonarás, que pensara en dejarte un día, abandonarte a tu suerte…Solo esperaba en silencio que se presentase el momento de hacerlo volar por los aires, haciéndolo parecer un accidente. Diría unas palabras graves mirando al infinito; las sentía tensas dentro de la boca, preparadas para salir.

Que el amor se transforma con los años."

miércoles, 17 de octubre de 2012

"Tú me hablas de colchones, yo te agobio con canciones"


Querido Tú,
Te escribo por aburrimiento, nostalgia y algún que otro motivo más. En realidad escribí esto anoche, pero olvidé publicarlo. Puedes leerlo ahora que son ideas frescas y todavía no han caducado.
Es lunes aquí, lunes muy tarde. Está lloviendo tan fuerte fuera que si mañana al abrir la ventana la iglesia en ruinas hubiera desaparecido totalmente no me extrañaría. He tirado un colchón en el suelo porque no soporto el ruido que hace mi somier y me gusta estar así, cerca del suelo. Estoy boca abajo en una posición bastante incómoda, balanceando los pies para los lados lentamente al compás de Brother in Arms. La pongo mucho aquí porque me recuerda a mi casa. No echo de menos mi casa, pero me da la sensación de que así esta habitación es más mía. He empezado a pegar cosas en las paredes, aunque no creo que ponga fotos de nadie. De momento tengo un cartel de un dedo acusador que me señala directamente la cabeza mientras duermo. Lo arrancamos una noche volviendo a casa. Estuve a punto de tirarlo porque el tipo que me lo dio ahora ni me dirige la palabra, ya ves que no todo es buen rollo en un Erasmus. Pero bueno, el caso es que el póster queda bien. Siempre he pensado que un blog a modo de diario no debería ser público, pero esta noche me apetece decir qué ando haciendo por aquí. Es lunes, pero podría haber salido a tomar algo si no estuviese lloviendo tanto. Aún así no tengo ganas de moverme hoy, he tenido demasiado contacto social desde que estoy aquí y quiero una noche en la soledad de mi colchón en el suelo y de los Dire Straits. Imagino tu cara de asco. Aquí no he podido hablar todavía de música más que con un tipo fanático de Mando Diao y que conoce a Belle and Sebastian. Fue una conversación agradable, pero él dejó de ser agradable hace un par de días, así que se acabó la música. Escríbeme algo sobre los discos nuevos que has escuchado, dime lo mierda que son todos y que ya no se hace buena música. Dios, echo tanto de menos un sofá, mi almohada y saber que estoy segura andando por la calle... Odio no poder ir sola por la noche, siempre tengo que volver con alguien. El vecino de abajo ya me ha visto llegar acompañada por tanta gente, que a saber lo que piensa de mí. Me falta la seguridad, en realidad es lo único que echo de menos, pero esta noche este colchón parece totalmente seguro... Que duermas bien.

viernes, 12 de octubre de 2012

Los Erasmus odian los sentimientos

Sostres tenía algo de razón con lo de que follar en un Erasmus es mucho más fácil. En parte es porque todas las noches sales y la probabilidad de encontrar un "sí" es mucho más alta. Además, si sales con otros Erasmus, la probabilidad se triplica porque hay una cierta presión sobre la que nadie habla, pero que todo el mundo nota y es que luego tus amigos te van a preguntar en Navidad... Aún así, no follar también es fácil, de hecho es mucho más sencillo y todos podemos conseguirlo. Así que todo depende de cómo te plantees tu estancia. Pero no es ese el problema, el problema es que no puedes ser un poquito sentimental porque te llevas el hachazo. Nadie viene de Erasmus a enamorarse, de Erasmus se viene a lo que se viene, a aprobarlas todas. Y un día, alguien te pone los pies en la tierra y te acuestas pensando en que eres vulnerable por haber intentado intimar verbalmente.
-Hola, ¿cómo te llamas?
-Yo a follar sólo.
Y esto está muy bien hasta que encuentras a la típica persona de un país muy lejano al tuyo, que te llama la atención por encima de la media y te apetece, además de conocerla por la noche, conocerla por el día. Que no le vas a pedir que sea el amor de tu vida ni el amor de tu Erasmus, pero que a lo mejor alguna tarde podríais salir, porque tenéis cosas en común y tal, y Pascual. Pero no, porque ahí se notaría que eres débil y eso da mucho miedo. Porque salir a tomar un café o una cerveza ya es claramente algo muy serio y podría llevar al mayor de los errores: enamorarse.
Y aquí estás, de fiestas Erasmus, encontrándote a diario a la persona de un país muy lejano, conociendo a otras de países menos lejanos y a veces queriendo conocer algo más que no puedes conocer.
Y le cuentas esto a tus amigos de España, que ven los toros desde la barrera y en la zona de sombra y te dicen que qué tontería, que aproveches, que te dejes de enamoramientos y la frase final, la que te entierra, "en un Erasmus los sentimientos te los dejas en tu casa". Y se quedan tan tranquilos. Tú nunca has hablado de enamorarte de nadie, pero esto es así, todo lo que no sea follar, ya es amor.



PD: esta entrada es anónima, intransferible e impersonal.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Llegando a Santiago

Al menos una vez en la vida hay que coger la mochila e irse al norte.
Los kilómetros que sean, los días que sean, pero andando y con peso en la espalda. Sin saber si dormirás a cubierto o no. Llevando dos camisetas, tres pares de calcetines y si puede ser, sin mapa.












El Camino, el que casi nos entierra.
Finales de junio de 2012.

martes, 4 de septiembre de 2012

Dicen que Palermo es así 



Que todo está a punto de caer y que bastaría un pequeño temblor para que no quedara nada.

viernes, 31 de agosto de 2012

Nervios previos a los nervios.

No sé hasta qué punto hay que ponerse nervioso por irse un año a vivir fuera. Quizás dependa de lo lejos que te vayas o de con quién te vayas o de si vas a volver mucho durante ese año. Variará de las expectativas que hayas puesto en ello o de si lo consideras algo "esperado". Tendrá que haber alguna diferencia entre los que se vayan a lugares más "exóticos" (pongamos al azar México o Turquía) o los que vayan a otros más cercanos (de nuevo al azar Perugia o un-pueblo-francés-raruno). Tal vez haya un indicador de nerviosismo o tal vez dependa de las ganas que se tengan por empezar a disfrutar ya esa experiencia. Sea lo que sea y a 21 días de coger el avión, al acostarme siempre pienso en lo mismo y no sé si son nervios o ansia sin más, pero me paso casi todo el día con la mente en otro sitio.

Y recuerda que

Y recuerda que