miércoles, 11 de marzo de 2015

Despacio

Porque estas cosas llevan tiempo y porque despacio es todo más seguro. Sin prisa y asegurando bien cada movimiento, como los niños cuando empiezan a caminar, como en la escalada o en la cuerda floja. Poco a poco.
Puede no parecer un gran movimiento, pero hoy he vuelto a escuchar música después de meses de silencio en mi habitación. Meses de silencio también en la escritura. Otro gran pequeño paso. He elegido una canción que no suelo escuchar a menudo para no desgastar los recuerdos que acumulé en su letra. Si alguna vez tienes la sensación de estar viviendo el mejor momento de tu vida, la mejor temporada, una situación inigualable, selecciona una canción y escúchala en bucle de la mañana a la noche y poco a poco (como todo), se irá instalando en tu mente la relación entre ese éxtasis pasajero y la melodía. Después apárcala un tiempo, deja que se asienten tranquilamente los recuerdos y cuando los necesites, echa mano de ella. No habrá fotografía o pensamiento tan vívido, nada podrá hacerte revivir esas sensaciones como la melodía de la canción que una vez sonó mientras estabas inmerso en ese gran momento que ahora no es más que lejanía y nostalgia. Hoy han vuelto a sonar todas esas tardes de paseos, noches de hablar sin sueño y mañanas de lluvia y mercado que cuenta mi canción. Ahora vuelve a estar en el cajón, para que no se "gaste", pero también está guardado el miedo a que alguna canción cobije malos momentos presentes; así que la música está de vuelta en mi habitación. 
Desde luego no es el acontecimiento del mes, pero mejor despacio que resbalarse.

Además, si tú no tienes prisa, yo sigo teniendo todo el tiempo del mundo.







Gracias por ser el arnés en este ocho mil particular.


Y recuerda que

Y recuerda que